Día 6 – 25 de junio
EPICA
Simone Simons y el guitarrista y vocalista Mark Janssen,
trabajan maravillosamente. Vuelos sinfónicos que contrastan con los gruñidos enérgicos, los riffs efectivos, teclados de todo tipo: portátiles o sobre raíles, a los que sumamos los chorros de llamas, gigantescas serpientes metálicas sobre el escenario, el grupo holandés ofrece un excelente rendimiento
Set list con una buena mezcla de sus álbumes, incluyendo 2
temas de Omega, el último y extravagante Abyss of Time – Countdown to
Singularity. 20 años de experiencia, se nota!
DRACONIAN
Cabe destacar que el grupo actúa con 2 cantantes que alternan los títulos: la morena Heike Langhans, cantante desde 2012, que pasa el relevo a la rubia, Lisa Johansson, de vuelta en el grupo después de veinte años. Buena presentación.
Una pequeña porción de gothic doom death con los suecos de
Draconian. El poderoso gruñido equilibrado por la clara voz femenina crea un
efecto agradable.
THE RUMJACKS
El sol recién descubierto definitivamente está beneficiando a los Rumjacks, ya que es una mafia totalmente compacta que rodea toda Warzone. Difícil, si no imposible, acercarse a disfrutar del punk celta del grupo. Algunos comienzan a golpear desde el área del restaurante con vista al escenario y cruzan el flujo de personas que intentan entrar o salir con dificultad, a veces bailando al ritmo de las melodías alegres del grupo. El ambiente es en todo caso festivo, incluso en los rincones más recónditos donde los espectadores sólo pueden hacer uso de su imaginación para ver a los integrantes de la formación australiana. Sin embargo, hubiéramos preferido que la fiesta estuviera un poco menos concurrida.
BLIND GUARDIAN
Hansi Kürsch afirma desde el principio que están ahí "por la magia" y lidera la actuación tanto como un narrador como un maestro del juego que protagonizaría un juego de rol. Interactúa regularmente con un público que le parece claramente adquirido y emana un aura de fuerza tranquila al cultivar una impresión de cercanía con los espectadores.
Un momento que ya se anuncia bajo el signo del
encantamiento: La ambientación
nocturna también se presta por completo a este ambiente íntimo. Después de
tocar algunos clásicos, el grupo también aprovecha este ambiente para anunciar
que tocarán Somewhere Far Beyond en su totalidad con motivo del 30 aniversario
del álbum. ¡Una obra que se presta particularmente bien a esta atmósfera de
cuentos fantásticos alrededor del fuego! Los aficionados en cualquier caso
están encantados y redescubren con placer los múltiples colores de las
composiciones que se entrelazan con fluidez mientras el grupo demuestra una maestría
y un juego afinado. En "The Bard's Song: In the Forest", los
espectadores conocen la letra tan bien que casi toman el canto solos. Después
de la interpretación del álbum, vuelve a los inevitables himnos con
"Mirror Mirror", el montaje se enciende y en "Valhala" ¡es
un desahogo total! Alegres lanzamientos de pogos aquí y allá y el estribillo
“Valhalla...." se grita y corea
con pasión e intensidad a pesar de lo avanzado de la hora: ¡todavía resonará en
el sitio tras la salida del grupo! Blind Guardian ofrece por tanto un
espectáculo calibrado y eficaz y es con la mente llena de historias fantásticas
que todo el mundo vuelve a buscar un merecido descanso!
Para concluir un día donde el heavy, el poder y la sinfonía fueron el centro de atención, son los veteranos de Blind Guardian quienes brindan el espectáculo.
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KADAVAR
Prueba de ello es la presencia en el escenario esta noche de Kadavar, una encarnación viva de la música (muy cool) y la moda (un poco más cuestionable) de los 70. Los pantalones acampanados y los bigotes nunca pasan de moda... Dejando de lado estas consideraciones superficiales sobre la ropa, el poderoso trío que es Kadavar realmente no tiene nada de qué avergonzarse de sus composiciones, ni tampoco de su rendimiento. Todos los
músicos muestran una energía excepcional y claramente disfrutan tocando
(mención especial a la verdadera batería eléctrica que es el baterista; el
traje dorado debe conferir superpoderes). Musicalmente, el buen rock de los
años setenta del trío da en el blanco, y la audiencia está compuesta claramente
por conocedores. ¿Los fanáticos tienen que estar presentes para que el Valley Stage esté tan ocupado cuando Guns 'n Roses está sucediendo al mismo tiempo en el
otro extremo del sitio? En resumen, Kadavar no es la primera banda en rendir
homenaje a los Sabbaths y Zeppelins en su música, pero a diferencia de muchos,
lo hacen excepcionalmente bien.
NIGHTWISH
¿Qué mejor manera de seguir la vena sinfónica que anima
Mainstage 2 hoy que los reyes indiscutibles del género, a los que llamé
Nightwish? Más de dos años después del lanzamiento de su último álbum, los
finlandeses (bueno, solo para dos tercios del grupo…) finalmente pueden
defender los títulos de Human live. :||: Naturaleza. y no lo dudes
Curiosamente, para canciones que aún no han vivido su bautismo de fuego en
nuestros países, Music, How's The Heart o Tribal pasan como carta en el correo
al público. Hay que creer que dos años son suficientes para asimilar un disco y
que estos títulos ya no son realmente nuevos… Con la notable excepción de un
precioso “Sleeping Sun”, el resto del set-list no dista más del disco. Una vez,
en particular con el ya tradicional "Ghost Love Score" pretendía
demostrar a cualquiera que todavía dude que Floor Jansen no tiene igual
vocalmente. Lo mencionamos en nuestro informe de la transmisión en vivo del año
pasado, pero la ausencia de Marco Hietala en la voz masculina en última instancia
no es un problema, Floor brinda perfectamente "Planet Hell" solo y el
multiinstrumentista Troy Donockley hace un sustituto bastante decente cuando
una voz masculina es básico. Por el lado de la escenografía, la avalancha de
efectos pirotécnicos debió deleitar a los fotógrafos y las pantallas colocadas
detrás del escenario aseguran una inmersión total en el universo siempre
onírico de Nightwish, incluso cuando las canciones hablan del nacimiento de la
vida en la tierra. En definitiva, un gran espectáculo acorde con el estatus del
grupo.
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IGORRR
Tuvieron problemas serios con el sonido. Pero aquí está, eso es lo que impusieron los caprichos del directo: un obstinado problema técnico que puso en salsa al sonidista durante un cuarto de hora.
Es difícil decir si este problema se resolvió por
completo, lo que sea, el espectáculo comienza y es un desastre que se
lanza al pozo. Éste va mucho más allá
de los límites del Altar, más precisamente a la medida del grupo. En las
esgourdes se entrelazan las múltiples capas electrónicas y orgánicas de Igorrr,
una bullabesa mágica y amorosa de la que Gautier Serre es el chef estrella. El
empujón fue breve, pero intenso.
GUNS N’ROSES
Es cierto que Axl ya no tiene la misma voz. Empieza bastante mal pero tras un tiempo de calentamiento mejora. Además, ¡se nota! se esfuerza y se deja llevar cada vez más. Está en bastante buena forma física. Y los Guns NO es solo la voz de Axl, sino también los riffs de Slash, perfectos esta noche, o la potencia de la sección rítmica.
Además de sus éxitos Welcome to the Jungle, Sweet Child o' Mine, November Rain o Night Train, ¡cantaron bastantes covers de éxito! Back in Black (AC DC), I Wanna Be Your Dog (versión de The Stooges) con la voz de Duff McKagan y, por supuesto, los clásicos Live and Let Die (versión de Wings) y Knockin' on Heaven's Door (versión de Bob Dylan). Espectáculo de 2h30!
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